Con la llegada del otoño a muchos de nosotros se nos cae el cabello en cantidades mayor es de lo que estamos acostumbrados, y es que los cambios de estación son épocas en las que nuestro cuerpo sufre modificaciones para adaptarse a las nuevas condiciones climatológicas.
El cuidado del cabello debe comenzar por una higiene adecuada, para lo que debemos elegir un champú que no irrite el cuero cabelludo. La leyenda de que lavarse el pelo todos los días favorece la caída del cabello está muy extendida, pero el problema es el uso del champú inadecuado y no la frecuencia del lavado. Es importante que elijamos aquel que se adecúe a nuestras características ya que la caspa o el exceso de grasa suelen ser causa o potenciadores de procesos de alopecia.
Además de una buena higiene, precisaremos de algún tratamiento adicional para solucionar el problema de la caída, para ello existe una amplia variedad de ampollas que nos pueden ayudar.
Por último las vitaminas por vía oral son una solución muy cómoda y lo ideal es que las combinemos con las ampollas para maximizar la eficacia de los tratamientos y notar antes sus resultados.